Boca Juniors se consagró este domingo campeón de la Copa Diego Armando Maradona al vencer a Banfield por 5 a 3 en definición por tiros penales, luego de empatar 1 a 1 en los 90 minutos regulares.
El desarrollo del encuentro se enmarcó en la cautela por ambos lados durante los 46 minutos en los que se extendió el primer tiempo, porque si bien Boca fue el que manejó la pelota por mayor cantidad de tiempo, careció de profundidad, ya que cuando centralizó el juego perdió peligrosamente la pelota en tres cuartos de cancha, y cuando procuró perforar por los costados, Sebastián Villa se consumió más en en intenciones que hechos.
Y Banfield, que es el equipo con menor porcentaje de posesión del balón de los 24 que disputaron esta Copa Diego Armando Maradona, obviamente no se salió de ese molde de juego directo, que justamente consiste en recuperar apenas su rival supera la mitad de la cancha y lanzarse en pos del arco rival con el buen pie y la velocidad de sus volantes y delanteros.
Pero como el “Taladro” no encontró demasiados espacios para penetrar en la última línea boquense, esos 45 minutos iniciales se fueron consumiendo lejos de los arcos, a veces con el balón por los costados, otras por el medio del campo, pero casi nunca cayendo dentro de las áreas.
La mayor experiencia y jerarquía de los futbolistas boquenses, fue algo que tuvieron muy en cuenta sus colegas banfileños, que paradójicamente y por circunstancias opuestas, parecieron compartir ese temor a perder.
Iban 18 minutos del segundo período cuando el colombiano Edwin Cardona recibió de izquierda a derecha de Zárate, enganchó al medio para sacarse de encima una marca cercana y con un furibundo derechazo quebró la resistencia de su compatriota Mauricio Arboleda.
En los últimos instantes del partido Boca se quedó con nueve hombres por la expulsión de Emmanuel Mas y la lesión del ingresado Diego González cuando ya se habían producido los cinco cambios, y en la última jugada del encuentro, en el sexto minutos de descuento, Luciano Lollo logró el empate con un cabezazo.
Después llegaron los penales y un remate desviado del siempre cumplidor Jorge Rodríguez y el acierto de los cinco pateadores boquenses, el último Julio Buffarini, le permitió a los “xeneizes” ofrecerle también este título a quien fuera su hincha más célebre, el que le dio el nombre a este torneo tras su fallecimiento, Diego Maradona.