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En el marco del Plan de Control Nutricional, se llevó a cabo la segunda capacitación de “Exceso de Peso Infanto-Juvenil” destinada a referentes y responsables de comedores, merenderos y hogares. El encuentro se realizó en el salón Oval del Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología, con capacidad limitada de invitados y cumpliendo con los protocolos sanitarios por el Covid-19.

La capacitación corresponde a un ciclo de talleres que se realiza a través del área de Nutrición de la cartera social. Tiene como objetivo promover la educación alimenticia y brindar conocimiento sobre cuidados y prevención de bajo peso y sobrepeso en niñas, niños y adolescentes que asisten a comedores y hogares de distintos barrios de Misiones.

Dentro de los talleres se desarrollan temáticas como educación alimentaria, recomendaciones de alimentos, preparaciones saludables para las infancias, causas y consecuencias de la obesidad y bajo peso. También se realizan controles de peso y talla a cada niña y niño para obtener datos y trabajar en los programas vigentes, con la finalidad de bajar el número de infancias con exceso de peso.

Los comedores, merenderos y hogares que reciben estos talleres están a cargo del Ministerio de Desarrollo Social de la provincia y además de las instancias de formación, cuentan con otras asistencias como la comida de las cocinas centralizadas, módulos de mercadería y servicios de las otras áreas de la cartera social. La nutricionista, Mariana Benítez, comentó que la dinámica del encuentro comienza con charlas explicativas sobre causas y consecuencias de la obesidad y los criterios que se aplican en los relevamientos y controles. “Para nosotras, como profesionales, es muy importante que cada referente absorba los conocimientos porque se convierten en multiplicadores de salud y pueden ayudar a esos niños desde su lugar” afirmó.

Por su parte, la responsable del comedor del barrio San Marcos, Miriam Ferreyra, comentó que participar de los encunetros le permite llevar la información a las familias de su barrio y transmitirle contenidos sobre el cuidado de los alimentos y la prevención de sobrepeso. “En mi comedor son pocos los niños que fueron diagnosticados con sobrepeso y gracias a la tarea que realizan las nutricionistas podemos trabajar en eso y ayudarlos a solucionar con educación alimentaria” agregó. El comedor de Miriam recibe a 28 familias del barrio y a través de la comida que recibe, la preparación de meriendas saludables y su labor diaria, un total de 70 niñas y niños son alimentados y atendidos.

Por otro lado, la responsable del comedor del barrio Villa Bonita, Fabiana Acosta, recibe la comida de la cocina centralizada los lunes, miércoles y viernes y alimenta a un total de cien personas de su barrio. “Que podamos participar de estos talleres nos ayuda de gran manera porque nos informamos y transmitimos el conocimiento a las familias. Recibir la visita de profesionales de la salud y que atiendan a nuestros niños y niñas es muy importante”, comentó.

Poner el foco en las infancias misioneras es querer un futuro mejor para la provincia. Cuidar su alimentación es contribuir al desarrollo de infancias saludables y reconocer y garantizar el pleno acceso a sus derechos.

telam
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