La declaración final revisada por los jefes de las delegaciones reconoce además que el conflicto “está causando un inmenso sufrimiento humano y exacerbando las fragilidades existentes en la economía mundial”.
La “mayoría” de los miembros del G20 “condenan con firmeza la guerra en Ucrania”, según el comunicado final de la cumbre aprobado por todos los países, entre ellos Rusia, y publicado este miércoles en el último día de las deliberaciones que se realizan en la provincia indonesia de Bali.
Tal como adelantó este martes Télam, el texto revisado por los jefes de las delegaciones reconoce además que el conflicto “está causando un inmenso sufrimiento humano y exacerbando las fragilidades existentes en la economía mundial”.
La declaración, de 55 páginas y con varios anexos, admite que “hubo otros puntos de vista y diferentes evaluaciones de la situación y las sanciones” contra Moscú, y aunque reconoce que el G20 “no es el foro para resolver las cuestiones de seguridad”, afirma que esas “cuestiones de seguridad pueden tener consecuencias significativas para la economía mundial”.
El texto final conserva varios de los párrafos del borrador difundido este martes, entre ellos el que considera “inadmisible” el uso de armas nucleares o las amenazas de recurrir a ellas.
“El uso o la amenaza de uso de armas nucleares es inadmisible. La resolución pacífica de los conflictos, los esfuerzos para hacer frente a las crisis, así como la diplomacia y el diálogo, son vitales. La era actual no debe no ser la de la guerra”, apunta.
La declaraciòn final también resalta la relevancia de los acuerdos que permitieron desde julio exportar los cereales ucranianos bloqueados por la guerra y los fertilizantes rusos afectados por las sanciones, y pide su “continuidad” ante su vencimiento el 19 de noviembre.
La invasión rusa sobre Ucrania, que ya lleva casi nueve meses, dispararon los precios de los alimentos y la energía, empobreciendo a millones de personas y profundizando la crisis alimentaria.
Ucrania es uno de los principales productores de cereales del mundo, pero tuvo hasta 20 millones de toneladas de granos bloqueados en sus puertos a raíz de la invasión de Rusia.
Esto se revirtió con el acuerdo firmado en julio, con la mediación de Turquía y la ONU, pero el Kremlin pone en duda su continuidad al argumentar que no se cumplió la parte que facilitaba la venta de sus fertilizantes y que los alimentos que salen de Ucrania no están yendo a los países que más lo necesitan.