El inicio del 2025 estuvo marcado por intensas tormentas que afectaron a varias regiones de Argentina, especialmente en la costa, donde la ciudad de Pinamar sufrió las consecuencias de precipitaciones que desbordaron los sistemas de drenaje. En la madrugada del 1 de enero, varias imágenes comenzaron a circular en redes sociales mostrando vehículos completamente sumergidos en agua en los estacionamientos de balnearios de la zona.
La tormenta, que se desató alrededor de las 3 de la mañana, dejó cerca de 70 milímetros de lluvia en pocas horas, lo que resultó en la saturación de los sistemas de desagüe en la ciudad. Muchos autos, estacionados en áreas cercanas a los canales de drenaje y balnearios que suelen contener el agua de lluvia, fueron atrapados por el torrente. Este espacio, que normalmente funciona como un piletón para evitar inundaciones, se vio desbordado por la cantidad de agua acumulada.
La falta de espacio adecuado para estacionar y la ubicación de los vehículos en zonas vulnerables fueron factores determinantes para que los autos terminaran sumergidos. En algunos casos, el agua alcanzó el techo de los vehículos, dejando a los propietarios sin oportunidad de retirarlos a tiempo.

La intervención de los bomberos
A medida que la tormenta continuaba, los bomberos de Pinamar acudieron al lugar para asistir a las víctimas del desbordamiento y rescatar los vehículos atrapados. Según los informes, se lograron extraer dos camionetas y un automóvil que habían quedado atrapados en un canal cercano al lugar donde se realizaban las celebraciones de Año Nuevo. Sin embargo, las condiciones de lluvia constante y el acceso complicado a algunas zonas dificultaron las tareas de rescate.
Imágenes impactantes y daños
Las imágenes del lugar mostraban escenas impactantes de vehículos inundados, con interiores completamente anegados. El impacto en los autos fue considerable, dado que el agua subió rápidamente, afectando no solo el exterior, sino también los sistemas internos de los vehículos.
El fuerte aguacero continuó entre las 3 y las 5 de la madrugada, con precipitaciones que alcanzaron aproximadamente 40 milímetros en ese lapso de tiempo, lo que agravó aún más la situación. La rápida respuesta de los bomberos permitió rescatar algunos vehículos, pero se estima que el daño material en los autos podría ser significativo.