En la madrugada de este lunes, efectivos del Comando Radioeléctrico de Puerto Iguazú protagonizaron un rescate inusual en el barrio Villa Alta. Un perro llamado “Boris” fue rescatado de un pozo de aproximadamente cinco metros de profundidad, luego de que un vecino alertara a la policía al escuchar los ladridos provenientes del lugar.
El operativo comenzó cerca de las 4 de la mañana, cuando la patrulla policial circulaba por la intersección de las calles Perito Moreno y Bertoni. En ese momento, un hombre de 49 años se acercó a los agentes para informarles sobre los sonidos que escuchaba desde un pozo cercano.
De inmediato, los uniformados se dirigieron al lugar indicado, donde confirmaron que un perro estaba atrapado en el fondo del pozo. Con sogas y herramientas improvisadas, el equipo policial inició las maniobras para rescatar al animal.
Boris fue asistido y revisado por un veterinario
En un lapso de pocos minutos, los agentes lograron sacar al perro sano y salvo. “Boris”, como lo identificaron los efectivos, fue trasladado a la dependencia policial para ser asistido. Allí, un médico veterinario revisó al animal y confirmó que se encontraba en buen estado de salud, sin signos de lesiones graves.
El hecho generó repercusión en el vecindario, donde los residentes destacaron la rapidez de la respuesta policial y la coordinación del rescate. Este episodio puso en evidencia la importancia de la colaboración entre vecinos y las fuerzas de seguridad en situaciones de emergencia.
Puerto Iguazú: un ejemplo de trabajo conjunto
La actuación de los efectivos del Comando Radioeléctrico demuestra cómo una alerta temprana puede marcar la diferencia en situaciones de riesgo, incluso cuando se trata de animales. El rescate de “Boris” resalta la importancia de mantener la atención y actuar frente a situaciones inusuales, en este caso, el ladrido persistente que llamó la atención de un vecino.
Este tipo de intervenciones no solo resaltan el compromiso de las fuerzas de seguridad, sino también el papel de la comunidad en garantizar la protección de todos los habitantes, humanos o animales.