El empresario e influencer del sector automotriz Ricardo Godoi falleció el lunes 20 de enero en un hospital privado de Itapema, Santa Catarina, tras someterse a un procedimiento quirúrgico relacionado con una tatuaje. Godoi, de 45 años y con más de 215.000 seguidores en Instagram, era conocido por compartir contenido sobre vehículos de lujo y su estilo de vida, lo que lo posicionó como una figura destacada en su área.
Según informó un amigo cercano de la familia, el procedimiento implicaba anestesia general para realizar un tatuaje en su espalda. Sin embargo, Godoi sufrió una parada cardiorrespiratoria durante el proceso de sedación e intubación, antes de que comenzara la intervención. A pesar de los intentos del personal médico, no se logró reanimarlo.
El estudio de tatuajes, que contrató a un anestesiólogo y un hospital privado para garantizar la seguridad del procedimiento, emitió un comunicado lamentando lo ocurrido y detallando los pasos previos al procedimiento. Según el comunicado, se realizaron exámenes médicos que no indicaron riesgos aparentes y se contó con los equipos necesarios para la intervención.
La Policía Civil investiga las causas del fallecimiento
La Policía Civil de Santa Catarina abrió un inquierto para determinar las circunstancias y posibles causas de la muerte del empresario. Entre las primeras informaciones se destaca que Godoi había informado a sus seguidores en redes sociales sobre su decisión de someterse al procedimiento quirúrgico.
Horas antes de fallecer, publicó un mensaje en Instagram en el que reflexionaba sobre su pasión por los vehículos personalizados: “Nem todo mundo entende o universo das rodas personalizadas, das cores exclusivas e dos acabamentos únicos”, escribió en portugués, destacando su amor por la innovación en el diseño automotriz.
El velorio de Ricardo Godoi se llevó a cabo este martes 21 en el Cementerio Vaticano Itajaí, en la ciudad de Itajaí, Santa Catarina. El entierro estaba previsto para las 17:00 horas del mismo día.
Influencer automotriz y empresario de lujo
Godoi era propietario del Godoi Group, una empresa dedicada a la importación y venta de vehículos de lujo y superdeportivos. Entre los modelos que comercializaba se encontraban marcas como Ferrari, Porsche y Lamborghini. Su experiencia en el sector lo convirtió en un referente en el mercado automotriz de alto nivel en Brasil, siendo reconocido por sus logros como uno de los principales vendedores de una marca alemana durante varios años.
Amigos y colegas del empresario destacaron su dedicación profesional y personalidad. Ricardo Portes, un amigo cercano, señaló que Godoi no solo tuvo éxito en los negocios, sino que también dejó una marca en su entorno, ayudando a otros a ingresar al mercado de vehículos de lujo.
Godoi deja esposa e hijos, además de un legado como influencer y empresario. Sus seguidores expresaron conmoción y tristeza ante la noticia, llenando sus publicaciones de mensajes de apoyo y despedida.
Riesgos de la anestesia general en procedimientos no quirúrgicos
El fallecimiento de Ricardo Godoi abrió un debate sobre los riesgos asociados a la anestesia general en procedimientos no quirúrgicos, como los tatuajes. Según especialistas en anestesiología, la sedación profunda puede presentar complicaciones, incluyendo dificultades para mantener la respiración espontánea y alteraciones en la presión arterial o frecuencia cardíaca.
La médica anestesióloga Esthael Cristina Querido Avelar explicó que estos procedimientos deben realizarse en entornos seguros, con personal capacitado y equipos especializados para mitigar posibles riesgos. Además, enfatizó la importancia de que los pacientes firmen un consentimiento informado donde se detallen los riesgos asociados.
El Consejo Regional de Medicina de Santa Catarina aclaró que, aunque no hay prohibiciones específicas para el uso de anestesia en este tipo de intervenciones, es fundamental que los profesionales cumplan con todas las normativas de seguridad y ética.
El caso de Ricardo Godoi continúa bajo investigación mientras sus seres queridos, seguidores y colegas lamentan su pérdida.