El Gobierno nacional incorporó al Cártel de los Soles, señalado como liderado por Nicolás Maduro y Diosdado Cabello, al Registro Público de Personas y Entidades vinculadas a Actos de Terrorismo y su Financiamiento (RePET). La medida fue oficializada este martes y se enmarca en los compromisos internacionales de la Argentina contra el terrorismo y el narcotráfico.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, anunció públicamente la decisión y remarcó:
“Declaramos al Cártel de los Soles como organización terrorista y narcocriminal. Maduro y su séquito son narcoterroristas. Ni en la Argentina ni en ningún lugar del mundo van a poder llevar a cabo sus actividades criminales. Para este Gobierno, el que las hace, las paga. Acá o donde sea”.
La resolución fue resultado de un trabajo conjunto entre Cancillería, conducida por Gerardo Werthein, el Ministerio de Seguridad y el Ministerio de Justicia. Según informes oficiales, el grupo desarrolla actividades ilícitas de alcance transnacional, como narcotráfico, contrabando y explotación ilegal de recursos naturales, además de mantener vínculos con las FARC y otras estructuras criminales de la región.
Cooperación internacional contra el narcoterrorismo
La declaración se alinea con medidas adoptadas por Estados Unidos, Ecuador y Paraguay, que ya habían catalogado al Cártel de los Soles como organización terrorista. Con la inclusión en el RePET, Argentina podrá aplicar sanciones financieras, restricciones operativas y medidas de control destinadas a impedir que el sistema financiero nacional sea utilizado para fines ilícitos.
Desde Casa Rosada señalaron que la decisión busca reforzar la cooperación internacional en seguridad y justicia. “Con esta decisión, la Argentina reafirma su compromiso con la paz, la estabilidad y la seguridad hemisférica”, expresaron en un comunicado oficial.
Qué es el Cártel de los Soles
El Cártel de los Soles se configura como una red integrada por altos mandos militares y funcionarios del régimen venezolano. Su nombre proviene de los soles que distinguen los uniformes de generales de la Guardia Nacional Bolivariana.
Investigaciones de la DEA y del Departamento de Justicia de los Estados Unidos sostienen que la organización produce, almacena y transporta cocaína en colaboración con las FARC, utilizando puertos, aeropuertos y pistas clandestinas controladas por militares venezolanos.
En 2020, el Departamento de Justicia norteamericano presentó cargos de narcoterrorismo contra Maduro, Cabello y otros jerarcas chavistas, acusándolos de conformar un entramado delictivo destinado a financiar al régimen a través de la exportación de cocaína hacia Centroamérica, el Caribe, México y Estados Unidos.