Los goles del encuentro fueron convertidos por Exequiel Zeballos y Miguel Merentiel, en un partido donde el Xeneize fue más práctico y contundente que su eterno rival.
Durante los primeros minutos, ambos equipos se mostraron cautelosos. River probó con remates lejanos de Salas y Castaño, mientras que Boca respondió a través de Zeballos. Sin grandes emociones, el primer tiempo parecía encaminarse al empate, hasta que en el minuto 46, un pelotazo de Lautaro Blanco derivó en una jugada que terminó con Zeballos aprovechando un rebote de Armani para abrir el marcador.
River reclamó una falta previa de Milton Giménez sobre Paulo Díaz, pero el árbitro Nicolás Ramírez y el VAR convalidaron la acción.
Apenas iniciado el complemento, Boca amplió la diferencia: Zeballos ganó por velocidad sobre la derecha y asistió a Merentiel, que definió con el arco libre para el 2-0. Fue un golpe del que River no pudo recuperarse.
El equipo de Úbeda dominó el resto del encuentro y pudo haber ampliado el resultado, pero Giménez desperdició varias ocasiones claras. River, por su parte, intentó reaccionar sobre el final, aunque sin claridad ni profundidad.
El Millonario atraviesa un momento crítico: sumó ocho derrotas en los últimos once partidos, con dos eliminaciones coperas incluidas, y peligra su clasificación a la Libertadores. Si Riestra o Argentinos Juniors lo superan en la tabla anual, podría caer a zona de Copa Sudamericana.
Boca, en cambio, consolida su liderazgo con 26 puntos en la Zona A, mientras que River se ubica sexto con 21, en una de las peores rachas del ciclo de Marcelo Gallardo, quien recientemente renovó su contrato por un año.
Con esta victoria, Boca no solo se asegura presencia internacional en 2026, sino que también recupera confianza y aire en el tramo final del torneo.
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