La Inspección General de Justicia (IGJ) prohibió a la empresa RE/MAX ejercer la actividad inmobiliaria, como resultado de un pedido del Colegio Único de Corredores Inmobiliarios de la Ciudad de Buenos Aires (Cucicba). Así, ordenó la inmediata disolución y liquidación de la empresa.
El organismo consideró ilícito el modelo de negocios, dado que la actividad no puede ser franquiciable.