“Las propuestas de Haddad para la presidencia han sido constantemente modificadas para la manipulación de electores. Los esfuerzos de la prensa y del TSE para desmentir las teorías creadas por la red de desinformación del candidato opositor no han tenido la velocidad y el alcance necesarios. Para evitar esto el Plan de Gobierno Haddad 13 ahora fue registrado en una tecnología innovadora e incorruptible de registros distribuidos por computadoras de todo el mundo, el blockchain, que también está detrás de la moneda Bitcoin (fenómeno reciente y que tiene alto valor de mercado) y viene siendo apuntado como la solución para ciudades inteligentes y gobiernos transparentes”.
Así arranca el posteo en la web del candidato Fernando Haddad, el contrincante del polémico Jair Bolsonaro en las elecciones por segunda vuelta de Brasil.
El equipo de Haddad usó la cadena de bloques de Decred para dejar un registro inalterable de su propuesta electoral, ya que durante la campaña electoral se han difundido noticias falsas (fake news) que han desvirtuado su mensaje.
El registro estuvo a cargo de la empresa OriginalMy, especialista en asentar documentos auténticos en blockchain. La transacción correspondiente quedó confirmada en la red de Decred el pasado domingo 14 de octubre, según el certificado emitido por la plataforma.
Aunque el tema de las criptomonedas y la cadena de bloques no fue central en la campaña brasileña, si fue abordado por varios de los aspirantes a la presidencia. Entre los que tuvieron posturas más favorables hacia los criptoactivos estuvo el candidato Joao Amoedo, con su propuesta de gobierno digital, pero Amoedo terminó en el quinto lugar en la primera vuelta.
Los candidatos que lograron su pase a la segunda vuelta, pautada para el próximo 28 de octubre, no expresaron públicamente cuál será su política sobre las criptomonedas, de alcanzar la presidencia.
Fernando Haddad da esta primera muestra concreta de su afinidad con la tecnología de la cadena de bloques, pero en su gestión frente a San Pablo ha mantenido una postura favorable al uso de las nuevas tecnologías en la gestión pública y se lo reconoce como un impulsor del software libre en organismos públicos.